eluniversal-méxico: A pesar de que hubo seguidores que llegaron 27 horas antes a la firma de autógrafos de Avril Ramona Lavigne Whibley en el DF, la cantante o la gente que le rodea trataron mal a los seguidores.Se entendería que como en otros casos, llámese Shakira, Ricky Martin o incluso el mismísimo Paul McCartney (como sucedió en la firma que dio en Nueva York hace unos meses) la interacción con los seguidores sería cálida. No obstante, el equipo de Lavigne, en este caso más Ramona que Avril, condicionó el encuentro a los asistentes.
“Nos dijeron que nada de fotos, nada de darle la mano, ni mucho menos abrazarla o darle un beso en la mejilla. La verdad es que eso es mala onda, ya que hay gente que llegó aquí desde las 3 de la tarde del domingo y lo que menos esperamos es que nos digan eso”, manifestó a EL UNIVERSAL Adrián Austria, de 19 años, y quien se dijo fan de hueso colorado, nada más que ahora un tanto decepcionado.
Pero las inconformidades no quedaron ahí, decenas más de seguidores coincidieron en ese sentido. De hecho, hasta a la prensa que asistió a dicha cobertura en una tienda de discos al sur de la ciudad, le tocó de esa embarrada.
Aunque la invitación a los medios de información era para ser testigos de todo el evento, con una duración de aproximadamente una hora, estos fueron desalojados luego de que la cantante posara ante las cámaras durante un escaso minuto como si se tratara de una diva.
Minutos después permitieron nuevamente a la prensa regresar a tomar unas cuantas fotografías mientras la punk-roquera iniciaba con la firma de autógrafos. Minutos después invitaron a los representantes de los medios a dejar el lugar.
Con todo y eso, hubo algunos seguidores que dejaron escapar algunas lágrimas al estar cerca de la cantante, quien ofrecía sonrisas forzadas.
Al evento asistieron alrededor de 700 seguidores, de los cuales, sólo 250 tuvieron oportunidad de estar cerca de su estrella.
La noche del pasado jueves, durante la entrega de los premios MTV latinos, Lavigne tuvo una actitud similar durante la alfombra roja, que recorrió sin hacer caso a los fans, a diferencia de otras figuras como el líder de The Cure, Robert Smith, quien prodigó sonrisas.
La intérprete de Complicated se presenta este martes en el Palacio de los Deportes, donde mostrará su nueva producción The best damn thing.
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